Libro

Libro
Ahimsa es vida

martes, 26 de septiembre de 2017

Unidad frente a división

Hay hombres y mujeres que hablan de división y no de respeto ni de libertad, son como cohetes que queman el combustible de su nave que va hacia ninguna parte.

La abajo firmante quiere declarar que la vida debe ser vivida, que los sueños deben realizarse, que la meta de todo ser humano es ser feliz. Son palabras, palabras y palabras cargadas de sentidos y verdades, debemos saber que tenemos el derecho de vivir en el país donde hemos nacido, donde las costumbres, la lengua, la idiosincrasia, forma parte de nosotros y nos da alas para ir hacia donde tenemos que ir, no ser exiliados o vivir en campos de refugiados o en otros países porque hay personas que promueven la división.

En un país donde la unidad es la fuerza, aunque se vivan caminos divergentes, todos tienen derechos, derechos a la democracia y a vivir con respeto, en cambio, si vivimos en un país donde se proclama la división, los derechos dejan de existir trayendo graves consecuencias para todos.

Ya de por sí la vida en la tierra es caótica, no se puede prever las consecuencias de la violencia ya sea de palabras o acciones y aun así estamos a la merced de unos individuos que en lugar de buscar soluciones se comparan unos a otros envenenando el aire que respiramos,  asustando a una parte de la humanidad que no sabe a quién creer y no confía en nadie.

Para tener un mayor control sobre las personas se crean guerras frías y calientes y muchos pensamientos oscuros de una época sombría de ignorancia y de crueldad afloran como si fueran sombras que se ciñen sobre nuestras vidas sintiendo sus garras en nuestra piel, y reabriendo viejas heridas una y otra vez que jamás cicatrizarán.

Tras un periodo confuso y dividido promovido por los que quieren vencer manipulando y mintiendo, renace otro en el que la esperanza y la paz son los puntos de anclaje de la nueva bandera de la unión, solo así encontraremos la fuerza para luchar por un mundo mejor donde la tibieza de algunos se perderá y solo será un mal recuerdo.

La unión es la panacea para esa enfermedad llamada división y poder crear un mundo mejor en la paz, la justicia, la libertad, los derechos humanos y el respeto.
Firmado

Ángeles Carretero Casar

jueves, 21 de septiembre de 2017

Marinero


Olas rotas que traen espumas,
Gaviotas que hacen cabriolas,
Ojos melancólicos y húmedos que
Sueñan con volver a surcar las aguas
De ninguna parte.

Marinero, no estés triste,
Has surcado océanos de la vida,
Y has sido feliz en tus mares,
Amores y sacrificios, tempestades y calmas.

El ancla solo te permite soñar
Sentado en la roca con tus recuerdos,
Mirando el horizonte de tus deseos.

Soplan vientos de libertad
Que sientes en tus adentros.

El ancla de tus sueños se ha levantado,
Las olas suaves acogen tu barca,
Atrás queda la espuma de las olas rotas…

A la luz del sol moribundo
Decía adiós nuestro marinero…
(fotos de la red)

martes, 19 de septiembre de 2017

NO ES EL MOMENTO DE TENER MIEDO


:
Como decía Pitágoras:
“No podemos permitir que unos cuantos dicten el rumbo de nuestro planeta ni de la Humanidad”
“¡Hombre de estado!, antes de dar leyes al pueblo aprende bien las de la armonía”
“Vivir según la Naturaleza es vivir según los dioses”

Durante siglos nuestros antepasados nos han reiterado una y otra vez que destruir la naturaleza y a nosotros mismos es destruir el don sagrado que todos poseemos, la vida, con graves consecuencias para todos. Si seguimos destruyendo nuestro don sagrado dejaremos de ser seres humanos para convertirnos en gigantes bestias cuya única distracción es la crueldad.

El panorama que tenemos en el mundo entero es desolador. Ha llegado el momento de elegir y de tomar la decisión de luchar todos juntos por una vida mejor para todos en serenidad, progreso y equilibrio. Es hora de dejar atrás a los gigantes, a las mentes perversas que se alimentan de odio y violencia y que impiden la paz; no es el momento de tener miedo sino el momento de buscar soluciones urgentes al caos que estamos creando.

Ha habido grandes catástrofes provocadas por seres humanos cuyas consecuencias aún nos hacen sangrar nuestras heridas abiertas. En estos días la Madre Naturaleza se ha manifestado a través de sus entrañas, llorando y aullando sus gritos de desesperanza, haciendo mucho daño a miles de personas. No es el momento de que algunos Gobernantes hagan un pulso con la naturaleza, ni de relaciones de fuerzas ni de mostrar quien es el más poderoso. Es el momento de tomar medidas y buscar soluciones a tanta miseria, a tanta destrucción y a tantas violaciones de los derechos humanos en todos los países del mundo.

Todos los seres que vivimos en el planeta Tierra somos inquilinos efímeros, nada nos llevaremos el día del adiós definitivo. Así que ¿por qué no disfrutemos de las maravillas del planeta? ¿Por qué no hacemos lo correcto ayudando y compartiendo un poco de serenidad, alegría y amor con todo aquel que se encuentra en la tristeza y en la miseria?

No podemos separar los elementos que componen el planeta -agua, tierra, fuego, aire-, todos juntos forman la unidad de la Naturaleza al igual que todos los seres humanos formamos la unidad de la Humanidad.


Los Gobernantes tienen una responsabilidad muy grande hacia todos los ciudadanos y hacia la Naturaleza, es primordial que se centren en los problemas actuales, que busquen soluciones y que garanticen el respeto a la Naturaleza y la paz a la Humanidad. 

Secretos

Vivimos efímeros momentos íntimos
De secretos y vivencias.
Secretos de amores escondidos
Como perlas en el océano.

Secretos de un encuentro prohibido
De miradas furtivas y roces
Que duran la eternidad de un susurro.

Secretos de felicidad por realizar
Ese sueño que nadie comprende,
De profundas tristezas y alegrías
Vividos en el desván de la existencia.

Secretos de saber fluir con la vida
Cargando anillos y emociones,
De recuerdos y errores.

Lágrimas que han bautizado el alma,
Creando un renacer de alas
Para sentir la fragancia de la suave brisa
Y el nuevo sabor de la vida.

Secretos que solo viven en el alma
Del que ama, llora, siente y recuerda
Que la vida son momentos de miradas

Furtivas y roces de brisas amigas.


domingo, 17 de septiembre de 2017

Felicidad


Felicidad, flor solitaria que nace
En las aguas profundas y turbias
Del alma que se despierta
Al dulce aroma de la existencia
Con misteriosos lazos y amables brisas,
Sellando el vínculo sagrado de la vida.

Felicidad, diamante que nace
En las entrañas de los corazones
Donde el crepitar del fuego
Rompe las cadenas liberando
La luz en mil colores.

Felicidad, esencia de estrellas solitarias,
Que transitan por la vida cargadas de enigmas,
Tesoros de luces y alegrías,
Cofres de sombras y tristezas,
Brillando como el sol y la luna
A través de la fuerza de la experiencia.

Felicidad, vida y luz
Que debemos mimar y proteger.
No podemos ignorarlas ni matarlas
Porque si las ignoramos o las matamos,
Ahogamos nuestra alma en nuestra propia trampa.

Felicidad, amor y creación, luz y vida,
Fuerzas infinitas y eternas,

Nos recuerdan el olvido de nuestra esencia.