HAY QUE RECICLAR NUESTRA FÁBRICA DEL MENTAL

Estamos contaminados de pensamientos negativos, de hábitos sin consciencia, de telas de araña que nos mantienen presos dentro de unos parámetros sociales, nos sentimos marionetas en manos de otras personas, bien por familia, por trabajo, por amigos, por tradiciones y todos estos componentes nos atacan como un virus peligroso en nuestra fábrica del mental.

¿Cual debería ser el tratamiento de recuperación?

Bajo mi punto de vista, lo más importante, es llegar a ser conscientes de nosotros mismos, de nuestras situaciones, de nuestros problemas y de que realmente queramos salir de esas situaciones. El tomar consciencia es primordial ya que si no somos conscientes de nosotros no podremos saber lo que nos pasa tanto en positivo como en negativo y seremos incapaces de solucionar cualquier situación.

Todas las fuerzas que existen en el mundo, en la Naturaleza son conscientes, ya sean fuerzas materiales, mentales, emocionales, espirituales..., todas obedecen a otra fuerza superior y ésta fuerza superior obedece a otra y ésta a otra y así... hasta el infinito.

Todo en el planeta, en la naturaleza, en los humanos es energía, como decía Einstein "la materia es energía condensada", yo la llamo energía manifestada, todo se manifiesta dependiendo de lo que vayamos creando en nuestra fábrica del mental. Si estamos equilibrados crearemos situaciones positivas, si estamos desequilibrados crearemos situaciones negativas. Siempre hay consecuencias, si son positivas serán agradables y avanzaremos rápidamente y si son negativas sufriremos porque nos dolerán y nos retrasarán en nuestra evolución ya que para solucionarlo tendremos que tomar consciencia de nuestro problema. Las personas que son conscientes y realizan que sus vidas, sus situaciones son negativas pueden cambiarlas y transformarlas a mejor si lo desean, la energía se transforma no se destruye, es un principio físico, con lo cual no podemos actuar como si nada ocurriera en nuestras vidas o intentemos borrar recuerdos o vivencias de nuestra mente, esto es imposible, solo podemos transformar nuestra existencia siendo conscientes bien a mejor o a peor.

Todo se crea en nuestra fábrica del mental y lo vamos manifestando poco a poco, cada cual a su nivel de crecimiento y desarrollo, somos los responsables de nuestras vidas aunque no lo queramos admitir, nuestro presente es como es, debido a las decisiones tomadas o no tomadas ayer, hace un mes o un año… o diez años, da igual el tiempo transcurrido, los recuerdos, las vivencias están en nuestro interior y no los podemos olvidar, los podemos guardar en nuestro baúl de los recuerdos  pero el día menos pensado ese baúl se abrirá y todo saldrá de golpe, solo hace falta un aroma, una mirada, una palabra o un sentimiento para que todo aflore y volvamos a sentir lo mismo que cuando guardamos nuestros recuerdos en nuestro baúl, es mejor afrontar las situaciones por dolorosas que sean y mirar de frente nuestra vida  que esconderse de ella, esto nos ahorrará mucho dolor y problemas.

Por lo tanto hay que RECICLAR pensamientos, hábitos, actitudes, para ir transformando nuestro mental e ir creando un mejor presente, no olvidemos que cada día es un presente, el mañana nunca llega, solo es presente y todo está relacionado y sujeto a nuestras decisiones.

Cuando reciclamos nuestra fábrica del mental nos transformamos en guerreros invisibles, luchadores por la paz, luchadores por la justicia y solidaridad, descubrimos el significado real de nuestro respeto y el respeto hacia los demás, poniéndose en marcha  la maquinaria que junto con otros guerreros invisibles luchan en silencio y en la paz por crear un mundo mejor.

Muchos piensan "¿total para qué vamos a luchar?", hay tanto caos que es imposible arreglar todo este desaguisado que hay en el mundo, pero yo estoy convencida de que sí podemos transformar poco a poco este escenario si todos nos unimos para formar una fuerza invisible pero consciente de su poder, pudiendo llegar a unificar a la humanidad y a reciclar a los responsables de los gobiernos, a que tomen su responsabilidad de que hay millones de seres humanos de los que son sus representantes, que claman y piden AUXILIO, que no tienen que comer ni agua que beber, ni casas donde vivir. Los niños son moneda de cambio igual que las mujeres, sufriendo vejaciones y humillaciones intolerables.

Tenemos la responsabilidad de compartir nuestros pensamientos positivos y ayudar a RECICLAR a otras personas para que sean vigilantes con sus pensamientos, acciones, reacciones y de que la codicia no forme parte de esos virus que amenazan nuestros corazones.

Seamos conscientes y aceptemos que somos responsables y maestros de nuestras vidas y este estado de consciencia nos llenará de alegría y paz y nos hará sentir el impulso de una fuerza que no podremos obviar para luchar por nuestros sueños y por nuestros principios.

Que nuestra vida transcurra como un río sereno, cada día con un nuevo espíritu y una nueva visión.