Siento en lo más profundo de mi ser, la necesidad de compartir contigo el deseo de hablar con palabras sinceras y comprometiéndome en la lucha de AHIMSA por la paz y la verdad, dichas palabras deben estar apoyadas por silencios respetuosos, por silencios prudentes y silencios comprensivos para no permitir más la publicidad ruidosa y escandalosa del terrorismo, de la corrupción, de los dirigentes que permiten que su país vaya al precipicio llevándose consigo a miles de vidas. No se puede permitir más el silencio del grito de millones de voces que claman por su libertad, dignidad y justicia, "porque todas esas personas nos importan".
Mires por donde mires, el mundo vive en una demencia, en un caos intolerable e inaceptable. Nuestra vida discurre por el camino que nosotros trazamos en compañía de la brisa del aire o del polvo del camino. La Historia de la Humanidad debe servirnos para que aprendamos y evitemos cometer los mismos errores que antaño, y así honrar la memoria de millones de personas que han muerto y mueren cada día porque algunos individuos así lo han decidido. A nadie nos gusta que nuestras familias, hijos, amigos sufran y estén viviendo experiencias terroríficas, como que un niño juegue con una mina y le explote llevándose sus piernas; que unos padres entierren a sus hijos porque las balas, las bombas caen por doquier; que periodistas, fotógrafos hagan su trabajo y sean encarcelados y algunos condenados a muerte, otros raptados durante meses... Es inaceptable que estas violaciones de los derechos humanos queden impunes; que los problemas raciales sigan siendo la portada de periódicos etc. Hemos perdido los auténticos valores que nos definen como Seres Humanos y estamos dentro de una espiral demencial cuyo fin será caótico si no lo cambiamos.
Si somos capaces de sentarnos unos momentos a reflexionar sobre nuestra vida y observar con ojos bien abiertos lo que pasa a nuestro alrededor nos quedaremos atónitos, una veces maravillados y otras decepcionados. Hay cientos de argumentos, de situaciones por lo que las personas están más irascibles, nerviosas, agresivas; la crisis económica nos toca y nos ha tocado a todos y a todos los países de la tierra, los problemas de la Humanidad son problemas de todos nosotros, el cambio climático es una realidad que traerá a todos los habitantes del planeta grandes problemas si no ponemos remedios urgentes.
El escenario que tenemos delante no nos gusta y por esa razón no podemos seguir en silencio, no podemos aceptar este escenario grotesco. Es el momento de hablar, "libros, caminos y días llevan al hombre a la experiencia y a la sabiduría", no tenemos otra opción que avanzar y ser responsables de hacerlo bien. Tenemos que cambiar ese escenario macabro por otro de risas, de paz, de progreso, de bienestar para todos los seres humanos.
Todo es posible si nos unimos y luchamos juntos, sin violencia pero con firmeza, con compromiso y lealtad hacia nosotros mismos y hacia los demás.
Todo es posible si nos unimos y luchamos juntos, sin violencia pero con firmeza, con compromiso y lealtad hacia nosotros mismos y hacia los demás.
Porque ser libre no es solamente desamarrarse las propias cadenas, sino vivir en una forma que respete y mejore la libertad de los demás.
Detesto el racismo, porque lo veo como algo barbárico, ya sea que venga de un hombre negro o un hombre blanco.
Aprendí que el coraje no era la ausencia de miedo, sino el triunfo sobre él. El valiente no es quien no siente miedo, sino aquel que conquista ese miedo.
"Tengo un sueño, un sueño en que todos los hombres fraternicen y se sienten juntos en una gran mesa donde las culturas, los colores, las diferencias se aprecien y respeten pero no sean obstáculos... ", sin enfrentamientos, sin odio, sin desigualdad solo por el hecho de compartir un momento, una charla, una mirada...
Para realizar este sueño es imprescindible el combate por la paz que empieza en el espíritu de cada uno de nosotros, para ello disponemos de diferentes medios y procedimientos como son las redes sociales y nuestro pequeño universo, y poco a poco ir extendiendo las alas de nuestro mandala hacia los demás para que todos podamos tener derecho a la educación, a la sanidad, a viviendas dignas, a la seguridad, al bienestar, al progreso, al trabajo, a la dignidad, al respeto de uno mismo y de la naturaleza.
Para luchar por un sueño hace falta coraje, lealtad, fe y fuerza en uno mismo, muchos pensarán que es una utopía, una quimera, una ilusión pero todos sabemos que una sola persona puede cambiar el rumbo del mundo y de la Humanidad, pero para ello debemos creer en nuestros principios y en la no violencia. Como he dicho otras veces, aunque la violencia es más rápida y gane la primera batalla, jamás ganará al final, es imposible que así sea, ya que sería el aniquilamiento de la humanidad y del planeta y eso nunca sucederá, es importante que todos nosotros tomemos consciencia y que luchemos por la paz y la igualdad.
La no violencia se basa en el respeto, la comprensión, la aceptación de la diferencia con los demás, el amor hacia uno mismo y hacia los demás y solo luchando por la paz lograremos que la paz se instaure en el planeta.
Nuestra Historia de la Humanidad la hemos escrito todos nosotros y cada día la seguimos escribiendo, pero nuestro pasado violento ha sido escrito por algunas personas con esencia de odio y el resultado todos lo conocemos. En cambio, ha habido y hay otras personas con esencia de Amor que han logrado que su labor permanezca viva y su ejemplo nos siga proporcionando fuerza y coraje para seguir luchando por sus sueños y el nuestro. Si una sola persona ha hecho posible el cambio del rumbo de la Humanidad imagina como sería si todos juntos nos uniéramos, el resultado sería de un resplandor tal que su luz y fuerza sería mayor que el sol.
Para que haya progreso, para avanzar y que haya un cambio hace falta CAMBIAR LAS COSAS, no se puede decir que he cambiado y seguir siendo la misma persona. Se necesita acciones concretas, compromisos reales y serios y eliminar el terror y la desigualdad, no se puede permitir que hayan países donde el agua solo sirva para llenar algunas piscinas de unos señores que no se preocupan por la población que se muere de sed y hambre.
"Tengo un sueño...tengo un sueño..." de que luchamos juntos y AHORA es el momento.
Tenemos que llenar el corazón de cosas bonitas, de acciones buenas y justas y hay que tener cuidado de que el corazón no se llene de codicia, ya sea el corazón de un indigente o de un rey. No desperdiciemos más la vida, luchemos y celebremos la paz, que la sonrisa sea nuestro escudo y la belleza nuestra armadura.
No hay comentarios:
Publicar un comentario