Nuestro comportamiento nos define, define nuestra vida y tiene consecuencias para nosotros y para nuestro alrededor. Muchas veces no somos conscientes del efecto y no entendemos las reacciones de las personas que nos rodean, pero ¿nos paramos a pensar en esas consecuencias?, muchas veces la respuesta es NO.
Los seres humanos tenemos el derecho de ELEGIR, podemos elegir el camino de la paz, ya que la paz es el camino de la felicidad y serenidad o elegir el camino de la guerra, del oprobio, de la injuria, de la corrupción... de la muerte y miseria.
La paz es a la justicia lo que la guerra es a la injusticia y bajos estos dos caminos en estos momentos el mundo se mueve, creando una zona de arenas movedizas que todo engulle y una vez dentro es difícil salir.
Hay millones de personas, hombres y mujeres, jóvenes, menos jóvenes y personas mayores de todos los países del mundo, sin pensar en razas, credos, colores, cada uno con sus múltiples y diferentes profesiones que han elegido luchar por la paz, por el bienestar de todos, bajo un mismo estandarte "respeto y humanidad", protegiendo nuestra mayor riqueza, la Naturaleza, para que todos podamos vivir un poco mejor y en seguridad.
También existen millones de personas, hombres y mujeres, de todas las edades y diferentes estatus sociales que han decidido tomar el camino de la injusticia, de la crueldad, de la ignorancia y siempre están proclives a mostrar su violencia y brutalidad. Cada día vemos y oímos en las redes sociales la brutalidad de algunos individuos en todos los campos, incluso azotan a empleados si no han hecho bien su trabajo, como ha pasado en China y otras muchas vejaciones a lo largo y ancho del planeta, esos comportamientos tienen consecuencias para todos y son inaceptables. No se aprende bajo el látigo del terror, sus consecuencias serán de violencia física o psíquica, solo se aprende con respeto. Debemos concienciarnos, que la violencia solo engendra violencia, si realmente queremos avanzar hay que ser respetuosos, crear lazos de hermandad entre todos los seres humanos y a través del conocimiento y de la sabiduría los pueblos avanzarán.
Para poder cambiar las cosas tenemos que empezar en este momento, AHORA y empezar por nosotros mismos, no podemos seguir siendo la misma persona y creer que hemos cambiado. En estos momentos, donde la información llega a todos los lugares del mundo en cuestión de segundos, tenemos que empezar a pensar de forma diferente, empezar a cambiar nuestras actitudes y pensamientos, reconfortar a las personas que lo necesitan, crear nuevos proyectos, buscar nuevas energías, reciclar absolutamente todo lo que se pueda, intercambiar bienes, alimentos... proteger la Naturaleza...
La paz es a la justicia lo que la guerra es a la injusticia y bajos estos dos caminos en estos momentos el mundo se mueve, creando una zona de arenas movedizas que todo engulle y una vez dentro es difícil salir.
Hay millones de personas, hombres y mujeres, jóvenes, menos jóvenes y personas mayores de todos los países del mundo, sin pensar en razas, credos, colores, cada uno con sus múltiples y diferentes profesiones que han elegido luchar por la paz, por el bienestar de todos, bajo un mismo estandarte "respeto y humanidad", protegiendo nuestra mayor riqueza, la Naturaleza, para que todos podamos vivir un poco mejor y en seguridad.
También existen millones de personas, hombres y mujeres, de todas las edades y diferentes estatus sociales que han decidido tomar el camino de la injusticia, de la crueldad, de la ignorancia y siempre están proclives a mostrar su violencia y brutalidad. Cada día vemos y oímos en las redes sociales la brutalidad de algunos individuos en todos los campos, incluso azotan a empleados si no han hecho bien su trabajo, como ha pasado en China y otras muchas vejaciones a lo largo y ancho del planeta, esos comportamientos tienen consecuencias para todos y son inaceptables. No se aprende bajo el látigo del terror, sus consecuencias serán de violencia física o psíquica, solo se aprende con respeto. Debemos concienciarnos, que la violencia solo engendra violencia, si realmente queremos avanzar hay que ser respetuosos, crear lazos de hermandad entre todos los seres humanos y a través del conocimiento y de la sabiduría los pueblos avanzarán.
Para poder cambiar las cosas tenemos que empezar en este momento, AHORA y empezar por nosotros mismos, no podemos seguir siendo la misma persona y creer que hemos cambiado. En estos momentos, donde la información llega a todos los lugares del mundo en cuestión de segundos, tenemos que empezar a pensar de forma diferente, empezar a cambiar nuestras actitudes y pensamientos, reconfortar a las personas que lo necesitan, crear nuevos proyectos, buscar nuevas energías, reciclar absolutamente todo lo que se pueda, intercambiar bienes, alimentos... proteger la Naturaleza...
Todo a nuestro alrededor está reglamentado por normas, etiquetas, cánones, disciplinas para regir nuestras vidas pero nos olvidamos de la ÉTICA. Pasamos la mayor parte de nuestra vida trabajando y haciendo cosas que no nos gustan, perdemos mucho tiempo en disputas, banalidades, tiempo que jamás volverá; nuestro objetivo es conseguir más y más dinero, más poder incluso a costa de destrozar la vida a millones de personas cuyo único deseo es tener una vida sencilla y ver crecer a sus hijos dignamente.
Nos olvidamos de nuestra ética, de nuestros sueños, nos dejamos arrastrar por ese torrente humano que es el poder del consumidor, del materialismo y nos endeudamos hasta que caemos y perdemos todo. Nuestra ética y nuestra lucha por conseguir nuestros sueños verdaderos nos permite vivir una vida tranquila, serena y simple. La simplicidad de la vida es la clave de la inteligencia y de la felicidad, cuanto más simple es nuestra vida, seremos mejores personas, nos sentiremos más ligeros y felices, ya que las mochilas de los apegos se han caído.
Nos olvidamos de nuestra ética, de nuestros sueños, nos dejamos arrastrar por ese torrente humano que es el poder del consumidor, del materialismo y nos endeudamos hasta que caemos y perdemos todo. Nuestra ética y nuestra lucha por conseguir nuestros sueños verdaderos nos permite vivir una vida tranquila, serena y simple. La simplicidad de la vida es la clave de la inteligencia y de la felicidad, cuanto más simple es nuestra vida, seremos mejores personas, nos sentiremos más ligeros y felices, ya que las mochilas de los apegos se han caído.
Alimentémonos de ideas justas, de pensamientos positivos, mantengámonos en movimiento ascendente para que la espiral de nuestra vida esté activa y pueda crear otros mundos en lugar de una espiral descendente, pasiva y que todo destruye.
Si decidimos ser poetas tenemos que ser capaces de despertar el bien que anida en cada uno de nosotros, en el fondo de nuestros corazones.
Si decidimos ser bélicos crearemos guerras y nos convertiremos en cazadores de hombres, estaremos en medio de las arenas movedizas viendo como personas inocentes son engullidas y como nosotros mismos también terminaremos engullidos por ese espejismo que es el horror y sabiendo que la concupiscencia del espíritu de esos bélicos no puede extirparse sino a través de un examen de conciencia, con perdón y humildad.
No hay panaceas, no hay varitas mágicas que nos ayuden a encontrar la paz y reconfortar a todos los seres humanos, pero si todos ponemos nuestro entusiasmo, nuestro granito de arena el mandala de la paz se irá extendiendo a lo largo del planeta y cubrirá a la Humanidad entera.
Siempre el cielo nos trae su Luz, por la mañana el Sol, por la noche las estrellas y la luna, hay que elegir el camino correcto, solo depende de nuestras decisiones y ser valientes para seguir avanzando.
"No es el más fuerte ni el más inteligente el que sobrevive si no el más capaz de adaptarse a los cambios ( CH. Darwin)
"La sabiduría suprema es tener sueños bastante grandes para no perderlos de vista mientras se persiguen ( W. Faulkner)
"No es el más fuerte ni el más inteligente el que sobrevive si no el más capaz de adaptarse a los cambios ( CH. Darwin)
"La sabiduría suprema es tener sueños bastante grandes para no perderlos de vista mientras se persiguen ( W. Faulkner)
"Hay que seguir a las personas que solo nos hacen avanzar"